Pasó un año. Es tiempo de deternos un poco y recapitular.
Por eso, en línea con el post de mi amigo y colega Sandro Medina Tovar, comparto un poco de historia y reflexiones.
Estas son las 3 ediciones de Tinta Electrónica para leer o descargar.
Un poco de historia
¿Cómo surgió la idea? Sandro lo contó muy bien en Sin Papel, el sitio de Juan Carlos Luján:
Junto a Emiliano participamos en el primer Taller de Experimentos Periodísticos en Internet (Video), organizado por la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano (FNPI) en el 2009. Y desde entonces veníamos pensando en este proyecto de recoger testimonios de jóvenes y experimentados periodistas y comunicadores sobre su relación con las nuevas tecnologías. Prestamos mucha atención para que este e-magazine sea leído no solo hoy, sino mañana y siempre, pues aquí no brindamos recetas o formulas para el éxito, sino viviencias de periodistas y comunicadores que hoy tiene más retos que nunca.
De formato y portabilidad
Cuando llegó el momento de pensar en el formato, el e-magazine parecía ser el adecuado para el objetivo que perseguíamos.
En cuanto al soporte, trabajar con bytes nos otorga la oportunidad de la portabilidad. Y como queremos llegar a la mayor cantidad posible de estudiantes y profesionales, trabajamos constantemente para que pueda leerse en cualquier contexto y en cualquier dispositivo: PC, smartphone, eReader o tablet.
Todavía miramos de lejos el ideal de portabilidad que pretendemos, pero tenemos algunos avances y una pequeña prueba con el primer número: lo convertimos en el formato estándar (ePub) para leer en cualquier dispositivo.
Sólo 22 personas descargaron el ePub; si sos una de ellas, contanos qué experiencia tuviste. Aún tenemos mucho que experimentar y mejorar.
Sólo 22 personas descargaron el ePub; si sos una de ellas, contanos qué experiencia tuviste. Aún tenemos mucho que experimentar y mejorar.
Resultado de la prueba de clics sobre la Home del sitio. |
Los bytes también nos han dado el poder de la interacción. La revista se comparte, se distribuye, se recomienda, se critica, se debate y se mejora gracias a los lectores y los colaboradores.
Involucrar a los lectores es un objetivo de supervivencia.
La información relacionada al campo de la TICs que ellos comparten se reúnen en una curaduría automática en lo que llamamos Daily de Tinta Electrónica.
Y se involucraron cuando nos ayudaron a probar el primer boceto del sitio de la revista, que ya tenemos en beta y sobre el que seguimos trabajando; este año seguro les contaremos novedades.
La potencia de la red
Cuando algunos me preguntan qué es Tinta Electrónica, contesto que se trata de una red construida sobre una publicación.
Pues gracias a esa red, podemos conocer, dialogar y conectarnos con profesionales que trabajan con las tecnologías de la comunicación y la información en diferentes campos y en diferentes contextos nacionales.
Pues gracias a esa red, podemos conocer, dialogar y conectarnos con profesionales que trabajan con las tecnologías de la comunicación y la información en diferentes campos y en diferentes contextos nacionales.
Pablo Martín Fernández, periodista argentino, destacó en su blog Onlain el trabajo coordinado y compartido con periodistas de América Latina.
Desde México hasta Argentina, son por suerte pocos los países que no han tenido un colaborador que los represente. Incluso cruzamos el charco Atlántico y contamos con prefacios y colaboraciones de España y Portugal.
Mario Tascón, Pere Estupinyà y Gonzalo Alonso, han sido nuestros prologuistas que con sus textos y entusiasmo nos dieron fuerzas y apoyo para seguir.
Mario Tascón, Pere Estupinyà y Gonzalo Alonso, han sido nuestros prologuistas que con sus textos y entusiasmo nos dieron fuerzas y apoyo para seguir.
Y no sólo la relación es con profesionales de la comunicación. El aporte técnico (con el sitio) y artístico (con las ilustraciones de la tapa 1 y 2) de Pablo Carzola nos acompaña y es invaluable.Así como el trabajo de Juan Gensollen en el campo de la corrección de textos.
Reflexiones
Cada 3 meses, Tinta Electrónica abre un paréntesis entre la ola de información con el propósito de enfocar un tema y conocer las diferentes visiones de algunos protagonistas a lo largo de Latinoamérica.
Esa es la idea original y el camino que seguimos. Esperamos cumplir y no desviarnos, pero ustedes dirán, amigos lectores, realmente nos gustaría conocer sus opiniones para seguir mejorando; no duden en escribirnos en el muro o por e-mail.
Esa es la idea original y el camino que seguimos. Esperamos cumplir y no desviarnos, pero ustedes dirán, amigos lectores, realmente nos gustaría conocer sus opiniones para seguir mejorando; no duden en escribirnos en el muro o por e-mail.
La redacción en la nube
La distancia no es un obstáculo, sino que, paradojicamente, nos acerca más a la red, pues estamos parados en nodos diferentes.
Tal vez por eso, como también señaló Juan Carlos Luján, es difícil conseguir una foto de los editores juntos.
Delineamos la revista en lo que llamamos nuestra "Redacción en la nube"; una suerte de oficina con una columna en Lima (Perú) y otra en Juana Koslay (San Luis, Argentina).
Sobre los escritorios se apilan los documentos de Google Docs y los cajones Dropbox apenas cierran. Skype o últimanente los Hangouts de Google son nuestras salas de reuniones. Y las redes sociales nuestros puntos de distribución donde encontrarnos con los lectores.
Lo que se fue y lo que vendrá
¿Qué aprendimos?
- La curaduría aporta valor.
- Los intermediarios que importan son los lectores, gracias a ellos Tinta Electrónica llega a otros.
- En lugar de empezar a construir el yate, es preferible empezar por el bote e ir mejorando.
- América Latina tiene problemas comunes y contextos diferentes que vale la pena conocer.
¿Qué se viene?
- Más ediciones, por supuesto.
- El sitio como plataforma para obtener Tinta Electrónica y leerla donde quieras.
- Apoyo de instituciones educativas.
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